El síndrome de intestino irritable (SII), también conocido como colitis funcional o intestino irritable funcional, es un trastorno del aparato digestivo que afecta a millones de personas en todo el mundo y se caracteriza por dolor abdominal y cambios en el hábito intestinal (diarrea o estreñimiento) que no tienen una causa orgánica o infecciosa aparente. Aunque el síndrome de intestino irritable es un trastorno digestivo muy común, todavía se considera un trastorno invisible porque los síntomas son generalmente ocultos y no se pueden ver con un examen físico o radiografía.
síndrome de intestino irritable
Causas
Aunque se cree que el síndrome de intestino irritable es causado por una interacción entre factores psicológicos y biológicos, todavía se desconoce la causa exacta del trastorno, sin embargo, se le ha asociado con diversos factores, tales como: estrés, ansiedad, cambios en la dieta, desequilibrio de bacterias en el intestino, enfermedades inflamatorias del intestino (enfermedad de Crohn o colitis ulcerosa), entre otras.
Síntomas
Estos síntomas son físicamente notorios y causan molestias en el día a día, por eso es importante que cuando alguno se presente de manera sostenida se visite a un especialista:
- Dolor abdominal.
- Cambios en el hábito intestinal (diarrea o estreñimiento).
- Distensión abdominal o flatulencia.
- Sensación de saciedad precoz durante las comidas.
- Náuseas o vómitos.
¿Cómo controlar síndrome de intestino irritable?
Para controlar los síntomas del síndrome de intestino irritable se debe principalmente:
Eliminar del café, té y bebidas con cafeína.
Limitar la ingesta de alcohol.
Reducir el consumo de alimentos grasosos o fritos.
Evitar los alimentos que contengan azúcar refinada o harinas blancas.
Aumentar el consumo de fibra soluble e insoluble.
Incluir en la dieta probióticos naturales como el yogur, kéfir o chucrut.
Beber por lo menos 8 vasos de agua al día.
Hacer ejercicio de manera regular.
¿Cómo prevenir síndrome de intestino irritable?
Para prevenir el síndrome de intestino irritable se deben llevar acabo las medidas anteriores, ya que como se comentó en un principio, la causa puede ser multifactorial y actualmente desconocida, por lo tanto la prevención se basa en lo ya mencionado.
Mitos
Mito 1
Los síntomas del SII son producto de un problema psicológico. Realidad: Aunque existe una relación entre el estrés y los síntomas del SII, éste no es el único factor que causa el trastorno.
Mito 2
El SII no es una enfermedad grave. Realidad: Aunque el SII no es una enfermedad grave, los síntomas pueden ser muy incapacitantes y afectar la calidad de vida de las personas que lo padecen.
Mito 3
No existe tratamiento para el SII. Realidad: Aunque no se conoce la causa exacta del SII, existen tratamientos eficaces para aliviar los síntomas y mejorar la calidad de vida de las personas que lo padecen.
¿Cómo vivir con ello?
Lo ideal es aprender a disminuir los síntomas para asegurar una buena calidad de vida.
Preguntas frecuentes
¿Por qué se produce el dolor abdominal en el SII?
Principalmente porque hay un aumento de la sensibilidad de los nervios en el estómago y el intestino, lo cual hace que se sienta dolor con más facilidad.
¿La fibra dietética ayuda o empeora los síntomas del SII?
La fibra lleva a cabo un papel muy importe ya que ayuda a regular el tránsito intestinal, sin embargo, al ingerirla en grandes cantidades puede producir o empeorar los síntomas. Por esta misma razón, se debe aumentar la ingesta de fibra de forma gradual y siempre acompañada de abundante agua.
¿Hay que evitar ciertos alimentos si se padece SII?
No hay una lista fija de alimentos que deban ser evitados ya que cada caso es distinto y debe evaluarse de forma personalizada, sin embargo, se recomienda disminuir el consumo de alimentos grasosos, fritos y azúcares refinados o harinas blancas.
¿Los medicamentos para el tratamiento del SII son efectivos?
Sí, los medicamentos son efectivos para aliviar el dolor y la diarrea, sin embargo, es importante que sean indicados por un médico ya que de lo contrario podrían producir efectos secundarios.